Lanzado en plena cuarentena, Parcelario 2015 llevaba en la mente de Bodegas Obergo varios años. Con él, la bodega quería “trasladar todo lo que este valle significa a un vino especial”. Por esa razón, seleccionaron las mejores cepas de la parte más alta del valle, desde donde se divisa todos los viñedos y no se puede acceder con otro medio que no sea a pie.
Este capricho de Cabernet Sauvignon, Merlot y Garnacha “no es un vino cualquiera. Las barricas nuevas de roble francés en las que permanece dieciocho meses le otorgan elegancia y expresan perfectamente el carácter del paisaje, formado por laderas, bosques y barrancos. Notas de cuero y tostados que llenan la boca, ensanchando tu espíritu y manteniéndolo unido a una naturaleza original”.